EL RESCATE DE LICENCIAS DE TAXI, CAMINO DEL FRACASO AL SER ACEPTADAS SOLO 23

Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife y Cabildo ofertaban ayudas al abandono de la actividad a un máximo de 60 licencias, pero finalizado el plazo solo han aceptado 23 de las 52 peticiones presentadas en tiempo y forma. La UTAT cree que se ha debido a la desconfianza de los taxistas y al rigor de las bases.

Solo 23 titulares de licencia de taxi en Santa Cruz de Tenerife se beneficiarán de los 40.000 euros de ayuda al cese de la actividad. El ayuntamiento y el Cabildo de Tenerife ofertaron retirar un total de 60 licencias, pero solo han tenido cabida menos de la mitad.

Ya de entrada, el consistorio solo admitió 52 solicitudes, por entender que eran las que cumplían con unos requisitos básicos. Esta cifra, opinaron las asociaciones de taxistas, se podría ampliar porque se abría un plazo para subsanación de errores. Sin embargo no ha sido así.

Domingo Lara, de la Unión de Trabajadores Autónomos del Taxi (UTAT), cree que en este proceso han surgido varios problemas que han dificultado que hubiera más licencias beneficiadas.

“Muchos compañeros han desconfiado de la Administración”, explica. No se fían de que vayan a cobrar todo el dinero. Se estableció que los 40.000 euros se pagarían en tres años, aunque después el alcalde José Manuel Bermúdez se comprometió a realizar los dos primeros pagos juntos. “Por eso decimos que estamos deseando ver el primer cheque de 26.000 y pico euros con las dos anualidades”, añade.

El compromiso era retirar 20 licencias por año durante tres años hasta llegar a 60, pero no hará falta por la escasez de licencias que han resultado beneficiadas.

Lara hace autocrítica y dice que otro de los problemas se encontraba en las bases de la propuesta. “Se nos escapó lo de que había que estar 10 años consecutivos sin interrupción en el puesto”, dice. La UTAT explica que algunos propietarios de licencias pusieron un chófer y, durante el proceso de cambio, se produjo una pequeña para necesaria por todo el papeleo. Estas personas se han quedado fuera por este motivo, detalla.

Y casos particulares. Comenta el de un taxista que debe un recibo de basura del 99, que está prescrito. Aunque lo ha pagado, su petición ha sido desechada.

Todavía queda un mes para interponer recursos, pero no parece que la cifra de 23 se vaya a ver alterada drásticamente.

Víctor Melián, de la asociación Tele Taxi, señaló ayer la contradicción de que en el mismo número del Boletín Oficial de la Provincia (BOP) en el que se anuncian los beneficiarios de las ayudas se convoquen también las pruebas de aptitud para obtener el permiso municipal de autotaxis.

Por su parte, la cooperativa San Marcos, opinó que otro escollo había sido el requisito de estar al corriente del pago de todas las obligaciones impositivas con todas las administraciones.

Miguel Ángel González, secretario de la citada cooperativa, explicó que algunos dueños de licencias de taxis no estaban al corriente de sus pagos a la Seguridad Social precisamente a consecuencia del mal estado del sector y del exceso de licencias.

“Se podría haber llegado al acuerdo de descontar lo que se debía del total de la ayuda”, opinó.

González cree que la ayuda al cese voluntario de la actividad ha sido “un fracaso estrepitoso” y considera que la raíz del problema es que “no hay voluntad política” para solucionar un problema que se remonta año 1983.

SALUT Y BUEN VIAJE.

Share