Una sentencia del TSJ anula la orden de la conselleria de 2010 y deja en el aire la regulación del sector.
PACO MORENO | | VALENCIA

Para Sonia Viudez fue un día de enorme alegría, mientras que Andrés Esparza calificó la jornada de «catastrófica». Son las dos caras de la misma moneda, la del sector del taxi, que vive una revolución debido a la sentencia del Tribunal Superior de Justicia que ha anulado la orden de 2010 reguladora de los descansos semanales y el tope de servicio diario.
Viudez, presidenta desde octubre de 2011 de la asociación empresarial de autotaxis, estimó que el fallo del tribunal al recurso de esta entidad devuelve la libre competencia a los 3.000 taxistas que trabajan en Valencia y su área metropolitana. La sentencia anula la disposición, aunque no tiene carácter firme y el sindicato USO anunció al conocerla que presentará un recurso para impedir su aplicación.
«Cuanto menos trabajas, menos ganas», fue el argumento que empleó para explicar el motivo de que interpusieran un recurso a la orden de 2010. Finalmente, el tribunal entiende que la normativa es ilegal porque no solicitó antes de su aprobación un informe del Consejo Jurídico Consultivo, además de otros aspectos como una consulta que se hizo a los taxistas donde algunas papeletas aparecían modificadas.
La sentencia supone que ya no será obligado para el vehículo un día el fin de semana (sábado o domingo) ni otro día de lunes a viernes. Tampoco será necesario activar el famoso reloj del taxímetro, que tiene un tope de 12 horas seguidas para los autónomos y 16 horas para aquellos casos donde en el vehículo trabajan dos personas.
Esparza, secretario general del sindicato USO en el sector del taxi en la Comunitat, lo resumió con una simple frase: «ahora vamos a la jungla». La falta de regulación provocará a su juicio un ataque directo al derecho al descanso de los taxistas, además de elevar el riesgo de fraude hacia los usuarios.
Por su parte, la Conselleria de Infraestructuras, responsable de la orden reguladora y donde residen las competencias del taxi, se limitó a comentar que no se hará ninguna valoración hasta que llegue la sentencia, disponible desde ayer.
Viudez afirmó que de las mil licencias que contaban con asalariados, tras la entrada en vigor de la orden reguladora se ha pasado a 480. «Todos aquellos taxis donde trabajaban tres personas redujeron a dos conductores, debido al tope de 16 horas seguidas».
Citó otro ejemplo del perjuicio causado por la orden de la Conselleria, al indicar que si el traspaso «del coche se hacía a mucha distancia del último viaje, eso no descontaba en el reloj, sino que se incluía».
Esparza anunció que seguirán por la vía judicial con un recurso, aunque admitió que ahora se entra en una situación «desconocida, habrá que ver lo que hace la Generalitat». La primera petición es que se solicite un informe al Consejo Jurídico Consultivo, para cumplir la sentencia, y volver a emitir la orden reguladora.
En opinión de Viudez no es tan sencillo. «Si hacen eso, presentaremos otro recurso y ganaremos», para confiar en que la orden de 2013 «no nos perjudique mucho», en lo que se mostró dispuesta a la negociación. tilla, no plantea el mejor escenario. Ahora, todo el sector espera al próximo movimiento de la Conselleria, que debe determinar si regula de nuevo los descansos./Las Provincias

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