Con la aplicación de esta medida todas las carreras se facturarían como interurbanas. La mesa de trabajo evalúa a final de mes la puesta en marcha de la jornada de descanso.
La Laguna
La reorganización del servicio del sector del taxi en el municipio de La Laguna pasa por la supresión de la tarifa urbana, de un lado, y la aplicación de la jornada de descanso semanal, de otro, tal y como establece la nueva ordenanza reguladora.
Con todo, el Ayuntamiento y los representantes de los taxistas han convocado para final de este mes una reunión de la mesa de trabajo con la intención de unificar criterios y establecer un marco de actuación que defina por dónde debe “rodar” el servicio.
“Las tarifas llevan muchos años sin actualizarse”, subraya el concejal de Seguridad Ciudadana y Movilidad del Ayuntamiento de La Laguna, José Alberto Martín.
De hecho, la eliminación de la tarifa urbana es la fórmula que de manera progresiva se está implantando a nivel insular.
Los partidarios de este cambio sostienen que así se evita la confusión que genera el hecho de que durante el transcurso de un viaje dentro del término municipal, los taxistas se ven en la obligación de cambiar de tarifa urbana a interurbana cuando transitan por una vía de carácter insular.
Además, insisten en que esta medida no va a representar un incremento en el coste del servicio para los ciudadanos, ya que dependiendo de las características del desplazamiento existe un elemento uniforme que, finalmente, regula el gasto.
“Más allá de que se produzcan situaciones tales como de que unas licencias obtengan más retribución que otras, la cuestión es llegar a un punto de acuerdo”, destaca el concejal de Movilidad, quien adelanta que ya se han puesto en marcha todos los trámites para implantar esta modificación.
El otro “motor” del cambio lo representa la puesta en práctica de la nueva ordenanza reguladora, que entró en vigor el pasado 10 de marzo, y especialmente el capítulo referido a los días de descanso.
A propósito, a finales de mes está
previsto un encuentro entre los responsables municipales y un grupo de taxistas con diferentes posicionamientos, para evaluar cuáles han sido los resultados de la aplicación de la ordenanza.
En este sentido, José Alberto Martín puntualiza que en ningún caso se trata de una “imposición” por parte del Ayuntamiento, sino de un “compromiso asumido por la mayoría de los titulares del taxi”, mediante votación secreta y de manera libre. Tanto es así que los responsables municipales están abiertos a “modificar la ordenanza” siempre y cuando lo decida la mayoría y garantizando el cumplimiento de servicio público.
De manera casual, la caída en la demanda del servicio ha coincidido con la puesta en marcha de la ordenanza, si bien el concejal entiende que hay interpretaciones para todos los gustos.
SALUT Y BUEN VIAJE.
