José Alhama con algunos miembros de la asociación ante la parada de taxis de Inca.
Los profesionales exigen ser prioritarios en los cambios a efectuar en los vehículos afectados.
La Asociación de Taxis de la Part forana está preparando una demanda en reclamación de daños y perjuicios a Volkswagen. Esta asociación, además de englobar a taxistas de casi todos los municipios de Mallorca, acoge también a municipios de Ibiza.
La demanda está siendo preparada por Fedetaxi. Se trata de una federación nacional a la que se encuentran acogida la asociación mallorquina. A través de esta federación intentan presionar aún con más fuerza y plantear quizá “una demanda a nivel nacional”.
José Alhama, presidente de la entidad, manifestó ayer que “hace dos días se remitió una carta a la compañía en la que se le indica que a la hora de sustituir o cambiar motores o piezas se priorice a los taxis”. En esa misiva se hace constar que “es razonable que se priorice el sector del servicio público frente al resto de afectados dado que, por su mayor uso, su cuidado medioambiental debe ser mayor que el de los vehículos particulares”. El colectivo informa además que “se le han hecho saber estas circunstancias al ministro de Industria, Manuel Soria, instando a su departamento a que encare este asunto del lado de los profesionales y ciudadanos que adquirieron estos vehículos y no del fabricante alemán”.
José Alhama indica que “además, luego queremos ver como afecta ese cambio al motor; si consumirá más y si tendrá la misma potencia”.
Informe pericial
Los taxistas van a pedir un informe pericial sobre los cambios que se adopten porque “en ningún caso vamos a permitir que nuestros afiliados pierdan prestaciones. Pagaron una calidad y esa calidad es la que queremos”, indica Alhama.
Sólo en lo que se refiere a los taxis de la Part forana de Mallorca se calcula que puede haber entre 150 y 200 afectados. En estos momentos se está elaborando la lista de los mismos.
El presidente explica que “estos últimos años muchos taxistas han invertido en la compra de un Volkswagen o un Skoda, precisamente porque se ofrecían buenas condiciones”.
Alhama indica que “incluso se puede llegar a pedir el cambio del coche porque si, por ejemplo, uno se ha comprado un vehículo que consume cinco litros y tras el cambio consume ocho eso no es aceptable”.
SALUT Y BUEN VIAJE.
