TAXISTA EL 1 DE MARZO NO VOTES, POR LA ABSTENCIÓN ACTIVA Y LA AUTOGESTIÓN

El Instituto metropolitano del taxi, vuelve a repetir la misma formula rancia y sectaria de elecciones sindicales para la mesa técnica del taxi. Unas elecciones convocadas para el 1 de marzo, divididas en dos grupos de votaciones, unas elecciones solo para empresas del taxi y otras elecciones solo para autónomos. A los taxistas asalariados, como siempre se les mantiene en el olvido sin ningún tipo de representación. Desde la sección del taxi de la CNT, volvemos a decir lo mismo que dijimos en las anteriores elecciones sindicales del taxi, no a las elecciones sindicales del taxi, no a la mesa técnica del taxi del IMET, si a las asambleas y a la participación directa de todos los trabajadores del taxi en las decisiones que les afectan en su trabajo como taxistas, y en la gestión del taxi del área metropolitana de Barcelona.

A los trabajadores y trabajadoras autónom@s del taxi, les decimos que no vayan a votar, ni a participar en un sistema de elecciones segregado entre quienes tienen acumulación de licencias de taxi sin trabajar de taxistas, los autónomos que trabajan cada día el taxi, y los taxistas asalariados silenciados y explotados la gran mayoría en turnos de 12 horas por los que tienen acumulación de licencias en flotas y empresas.

Ir a votar a las elecciones del IMET, supone respaldar el modelo de explotación de licencias basado en la contratación de asalariados y en la liberación especulativa de los mismos títulos habitantes, no se sostiene sinó asumiendo duramente la carga social en largas jornadas de trabajo por los mismos taxistas, siendo afectados todos, autónomos y asalariados, otros sin embargo rentabilizan su inversión sin necesidad de conducir ni haber visto en su vida un volante mediante sociedades de capital.

Ir a votar supone estar de acuerdo con una ley Catalana del taxi donde se permite acumular hasta 50 licencias al reconocer a las personas jurídicas, permitiendo la capitalización de los mismos títulos habilitantes a inversores privados a través de sociedades de capital, generando un mercado especulativo que provocó una escalada de precios y encareció el coste de explotación de la actividad, que ni la propia administración es capaz de asumir el coste para retirar licencias.

Ir a votar el 1 de marzo supone aceptar la “ley del silencio” que impera en la mesa técnica del taxi, donde a las empresas y flotas de taxis nunca se las controla, ni se las investiga, ni se les pregunta por la situación en la que trabajan los taxistas asalariados.

Como en todas las elecciones sindicales para la mesa técnica del taxi, aparecerán los nuevos y los viejos “gurus” que competirán entre si prometiendo todo tipo de soluciones milagrosas, para que les votes. No nos dejemos engañar, en la mesa técnica del taxi quien tiene siempre la ultima palabra es el IMET y los políticos del consejo de administración. En la mesa técnica del taxi, no se puede cambiar la ley catalana del taxi, ni la ley del transporte, ni el convenio colectivo de empresas de taxis y vehículos de alquiler con conductor VTC de Barcelona.

Los trabajadores y trabajadoras del taxi tenemos un gran potencial en nuestra fuerza de trabajo, para cambiar las cosas haciendo propuestas en bloque (democracia directa), de modo que el sector pueda consensuar acuerdos sin intermediarios a través de consultas de carácter general. Somos perfectamente capaces de hacerlo, y lo demostramos los días, 18 al 23 de enero de 2019 donde los taxistas de Barcelona fuimos capaces de ocupar la gran vía de les Corts Catalanes, de organizar asambleas en plaza Cataluña y de tomar decisiones al margen del IMET y de los políticos del consejo de administración.

TAXISTA EL 1 DE MARZO NO VOTES, POR LA ABSTENCIÓN ACTIVA, LAS ASAMBLEAS Y LA AUTOGESTIÓN DEL TAXI DE BARCELONA.

SALUT Y BUEN VIAJE