CÓRDOBA – El Ayuntamiento ofrece diálogo «hasta el final» y Auttacor dice que la decisión está tomada.
Según publica la edició digital de ABC el Ayuntamiento de Córdoba y los representantes sindicales de los asalariados del sector del taxi llegaron ayer a un compromiso de diálogo para tratar de llegar a un consenso en el conflicto abierto por la reducción de la jornada laboral a 16 horas de lunes a jueves que, por el momento y según aseguró la edil de Movilidad y Seguridad, Ana Tamayo, «sigue siendo la idea y la creencia que maneja este Ayuntamiento», aunque «hasta el último minuto estamos abiertos a todo tipo de diálogo y a escuchar otras posibilidades», señaló.
De esta manera, y pese a que el alcalde, José Antonio Nieto, aseguró la semana pasada que la decisión ya estaba tomada y que ya se habían producido todos los diálogos y análisis de la situación, el Consistorio ha decidido abrir un nuevo plazo para el consenso con todas las partes afectadas—propietarios y asalariados—dejando abierta la posibilidad de una reunión a tres bandas para tratar de que «no se produzca una ruptura interna en el sector del taxi», aseguró Tamayo.
La concejala popular indicó que «el Ayuntamiento se compromete a mediar entre las dos partes para tratar de lograr la mejor solución posible», anunció.
Por su parte, Manuel Sánchez, representante de los asalariados del taxi del sindicato UGT, mostró su satisfacción por haber obtenido un compromiso por parte del Consistorio para que «la regulación que se haga del sector en este momento no sea a costa de que se pierdan puestos de trabajo. Sabemos que es difícil, pero hemos visto que la voluntad del Ayuntamiento está en esa idea de buscar esa línea y creemos que se va a llegar a ese punto», indicó.
Ambas partes hablaron de la presentación, para su estudio, de una lista de alternativas, entre las que se incluyen los horarios dobles vehículos con dos conductores, que los responsables municipales se comprometieron a «estudiar y medir su alcance» en este conflicto abierto que, durante la semana pasada provocara quejas, anuncios de movilizaciones e incluso denuncias por daños en los vehículos de algunos responsables de la Asociación del Taxi (Auttacor), en concreto del presidente, Miguel Ruano.
La Asociación no cede.
Pero para que se logre el consenso que busca el Ayuntamiento entre todas las partes afectadas, la tercera pata de este banco, la Asociación del Taxi, debe aceptar reabrir un diálogo que hasta hace una semana parecía no tener objeto, dado que la decisión estaba tomada.
El presidente de la Asociación, Miguel Ruano, no quiso entrar a valorar el resultado del encuentro entre el Ayuntamiento y los asalariados, pero expresó su extrañeza porque «el Ayuntamiento tomó una decisión en diciembre y es a la que me remito. No puedo decir otra cosa, yo confío en la palabra de la delegada porque su propuesta es la que se ha elevado y aprobado en la asamblea de esta asociación».
Más allá de las valoraciones, Ruano dejó claro que, en virtud de esta decisión ratificada en la asamblea, «no entendería un posible cambio de escenario ahora mismo. Me resulta difícil de creer que después de lo que se ha dicho se modifique la situación porque haya habido una serie de amenazas, protestas y graves acusaciones que, por nuestra parte, irán donde corresponde».
Acerca de la posibilidad de encuentro a tres bandas, Miguel Ruano fue taxativo: «no me voy a sentar con quien me insulta. Mi educación lo prohíbe»
SALUT Y BUEN VIAJE.
