Un sindicato sufre un acto de vandalismo en su sede, mientras los autónomos anuncian huelga a la japonesa.

El conflicto del taxi está muy lejos de solucionarse, a la vista de lo sucedido en las últimas horas en Valencia. La sede del sindicato USO sufrió ayer un ataque de vandalismo en forma de pintadas en su fachada, con insultos al secretario general de la entidad para el sector, Andrés Esparza. Mientras, un grupo de autónomos anunciaba que el próximo lunes hará una huelga a la japonesa, es decir, trabajarán gratis durante dos horas en una parada colocada a las diez de la mañana en la sede de la Conselleria de Infraestructuras.
Son sólo dos ejemplos de la necesidad de regular el sector, una condición que saltó por los aires con una sentencia dictada a finales del pasado noviembre, donde la Asociación Empresarial del Taxi consiguió ganar el recurso interpuesto contra la limitación horaria y los descansos obligatorios fijados en 2010. Desde entonces, la Generalitat tiene pendiente una solución.
Esparza hizo un llamamiento a la calma tras conocer el acto de gamberrismo. «Ruego a todos los compañeros asalariados y autónomos de este sindicato que no den importancia a las amenazas e insultos vertidos. Seguiremos con nuestra linea en la búsqueda de la legalidad».
Como adelantó LAS PROVINCIAS, la asociación empresarial y Unión Gremial pactaron los descansos semanales sin un límite horario, lo que fue trasladado a la conselleria como alternativa para ser transformada en un decreto.
No obstante, la decisión del director general de Transportes, Carlos Eleno, fue recabar más opciones, donde se conoce otra de los autónomos rubricada por varios sindicatos, y esperar a que llegasen otras para convocar una consulta.
De momento, indicaron ayer fuentes autonómicas, se han recibido «cuatro o cinco alternativas», que serán comunicadas al sector la próxima semana. La idea es que en dicha reunión se fije una fecha para la votación de los taxistas.
Las posturas de las dos propuestas conocidas hasta ahora son diametralmente opuestas. Mientras que en la pactada por los empresarios y Unión Gremial no se fija un límite horario, en la difundida por los autónomos se habla de un tope de 12 horas diarias y con los descansos aprobados en el último decreto de la Generalitat. Además, se fijan también las vacaciones estivales y la condición de que el segundo vehículo del mismo taxista trabaje sólo a partir de las 18 horas hasta las seis de la mañana del día siguiente.
Esparza añadió sobre esta propuesta que está convencido de seguir «el camino correcto y es además la postura que cuenta con el apoyo mayoritario del sector».
Acerca de las pintadas, comentó su seguridad de que se trata de «algún grupo aislado, dirigido o no: nos da igual. Serán las fuerzas del Orden y de Seguridad del Estado quien determine este punto».
En Valencia y su área metropolitana hay unos 3.000 taxistas, que todavía no han podido aplicar las tarifas de este año, con un incremento del IPC y la adecuación a la subida del IVA. La conselleria publicó la orden el 31 de diciembre, aunque con varios errores en su redacción que obligaron a anunciar una nueva disposición. Cuando sea oficial, los chóferes adaptarán los taxímetros a los precios fijados para este ejercicio.
Un grupo de chóferes ha decidido trabajar gratis durante dos horas en protesta por la falta de regulación del sector.

SALUT Y BUEN VIAJE.