Los dueños de taxis adaptados, llamados Eurotaxis, denuncian que sus gastos de mantenimiento son muy superiores a los de un taxi normal.
Aseguran que la retirada de subvenciones y las nuevas normas hacen que el servicio de Eurotaxi vaya a desaparecer por insostenible.
Una caravana de Eurotaxis (taxi adaptado para personas con discapacidad) han recorrido este miércoles a primera hora el Paseo de la Castellana, a modo de cortejo fúnebre, para denunciar que debido a la “asfixia económica” la flota de este modelo, formada por unos cien vehículos, va a desaparecer en Madrid.
El secretario de la Asociación Eurotaxi para un Madrid Accesible (AEMA), Julián Fernández, ha explicado que de manera “espontánea” y “voluntaria”, los Eurotaxis madrileños se han ido acercando sobre las 8 horas de este miércoles a la plaza de Santiago Bernabéu.
El objetivo de esta concentración es transmitir su “preocupación” por la desaparición del servicio, dado que, según explican, les es “imposible” mantener los vehículos -con costes un 50% superiores a los de un convencional- sin la ayuda de las administraciones.
Pretenden que salga del bolsillo de los taxistas y es imposible porque no podemos mantenerlo Según ha explicado, su problema se remonta a enero de este año, cuando aprobadas las tarifas para 2013, se determinó que si se pedía un taxi de manera telemática, el coste de carrera hasta el lugar iba a ser de 5 euros. Fernández ha explicado que en Madrid hay cien vehículos para todo el área de prestación conjunta y que cuando alguien lo solicita, tienen que recorrer distancias de 10, 15 ó 25 kilómetros.
“Esto nos supone un coste superior a 5 euros”, ha explicado el portavoz de la asociación, que ha añadido que después de llevar todo el año insistiendo con esta problemática, se han encontrado ahora que en el acuerdo entre el Ayuntamiento de Madrid y la Asociación Gremial del Autotaxi se renueva este “tope sin hacer ninguna excepción”.
El secretario de la Asociación ha explicado que también se suma que se han retirado las subvenciones que había, tanto unos servicios que pagaba el SUMMA para el transporte de personas con movilidad reducida, como unas ayudas directas a los propios usuarios de 720 euros anuales para este fin.
“Pretenden que salga del bolsillo de los taxistas y es imposible porque no podemos mantenerlo”, ha indicado Fernández, quien ha explicado que sólo el coche adaptado cuesta 32.000 euros frente a los 13.000 euros que puede costar adquirir un taxi convencional.
Esta es la razón por la que mayoría del centenar de Eurotaxis comience la semana que viene a mirar el cambiarse de coche.
Fernández es consciente de la problemática que esto supone para los usuarios porque “en muchos casos es la única forma de transporte que tienen”, por lo que reclaman a las administraciones (Ayuntamiento y Comunidad) y a las asociaciones principales del sector que busquen una solución a través de subvenciones.
En este punto, han advertido de que va a desaparecer este tipo de servicio especial (sobre todo indicado para discapacitados, pero que también se usa cuando se lleva mucho equipaje) y todo, pese a que una normativa obliga a que en 2017 el 5% de la flota tiene que ser accesible.
SALUT Y BUEN VIAJE.
