LOS TAXISTAS REDUCEN SU JORNADA A DIEZ HORAS EN BARAKALDO

El Ayuntamiento fabril toma la iniciativa y se convierte en el primero de Vizcaya en ajustar el horario laboral de los profesionales del sector.

Los taxistas de Barakaldo estaban ayer de enhorabuena. No descorchaban las botellas de champán porque el oficio es el oficio y ellos tienen que estar al volante. Pero no era para menos. Son los primeros de Vizcaya, «y probablemente también a nivel de España», que consiguen que su jornada laboral se rebaje a las diez horas.

Así será gracias a la aprobación ayer en el Ayuntamiento de esta reducción, que sólo se aplicará de lunes a viernes. Los fines de semana, como sólo trabajan la mitad de las 70 licencias existentes en la localidad, se mantendrán las doce horas diarias que ahora están generalizadas en el sector.

El presidente de la asociación de taxistas en el municipio, Ignacio Pablos, subrayaba que con esta modificación laboral «ganaremos mucho en calidad de vida sin que nuestros bolsillos se vean afectados». La clave, según explicó el portavoz del gremio, está en que «el pastel a repartir seguirá siendo el mismo». «El trabajo no va a aumentar por haber más coches en la carretera sino que, ahora, estaremos menos y se reducirá el tiempo muerto en las paradas», matizó.

Los efectos de la crisis.

La medida, además, llega en el mejor momento para los taxistas. «La crisis nos está afectando como a todo el mundo y pasamos muchas horas mirando al aire y, la verdad, es una tontería estar tanto tiempo así», se congratulaban varios profesionales en la parada del Palacio de Justicia.

Lo que han cambiado los tiempos. Los más veteranos recuerdan como algunos, «cuando no había regulación alguna», llegaban a pasar «hasta quince horas en el vehículo». «Eso no era vida, no conocían ni a sus hijos», lamentaban.

Ahora ningún conductor podrá exceder el límite horario permitido. Bajo riesgo de la aplicación de un correctivo por parte de sus propios compañeros. De hecho, ellos mismos se encargan de organizar su calendario de libranzas. «Un fin de semana libre de cada dos y un día libre entre semana», explican. En cualquier caso, todos se comprometían ayer a no dejar «nunca» en precario el servicio. «Si algún día se comprueba que hay una necesidad real de aumentar los horarios de forma puntual, no dudaremos en asumir nuestra responsabilidad»

SALUT Y BUEN VIAJE.

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