El Instituto Metropolitano ya tiene las alegaciones para la ordenanza que regulará el servicio.

El Instituto Metropolitano del Taxi ya tiene en su poder las alegaciones que los diferentes sectores afectados han presentado al borrador de la ordenanza que regulará la prestación del servicio adaptándolo a la normativa andaluza, que da de plazo hasta junio de este año para realizar esta adecuación, según informaron ayer fuentes del sector.Así, la previsión es que este organismo, presidido por la Diputación de Granada y en el que están representados la Junta, el Ayuntamiento de Granada y los consistorios del Área Metropolitana, convoquen mesas de trabajo para consensuar todos los flecos de esta ordenanza con los diferentes actores implicados: ayuntamientos, sindicatos, asociaciones de consumidores y los profesionales del sector.

El principal escollo del documento es la aplicación de la figura del área de prestación conjunta que recoge la normativa andaluza, la cual abre la posibilidad de que los taxistas ofrezcan sus servicios en cualquiera de los municipios que la integran.

El borrador de la ordenanza que el Instituto Metropolitano elaboró hace unos meses propone para ello una fórmula mixta por la que un taxista debería cubrir por defecto el área para la que recibió la licencia aunque podría recoger a un usuario en otro municipio si se concierta con anterioridad, por ejemplo, por vía telefónica.

No obstante, la mayoría de los taxistas de la capital no quieren que el servicio se abra totalmente por considerar que la llegada indiscriminada de compañeros del Área Metropolitana puede reducir su volumen de trabajo, de modo que este asunto deberá ser negociado.

Algunos sectores abogan incluso porque la apertura se haga de manera progresiva y evaluando los efectos que va teniendo en el sector esta apertura del servicio, mientras que desde el Instituto Metropolitano del Taxi defienden la necesidad de prestar un servicio de calidad al ciudadano, a través de fórmulas que permitan que ningún pueblo se quede desatendido y que, a la vez, un taxi que lleva a un cliente a un municipio no tenga que volver vacío, ya que esto también encarece el servicio.

Por el momento, “todo está en el aire” y pendiente de las negociaciones, que se intensificarán a partir de ahora, según añadieron las mismas fuentes. /Granada hoy

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